El pixel en el ojo es una enajenación mental de José García Obrero y Óscar Sotillos, cuya gravedad se puede medir en 3 estados básicos: Imágenes de silencio: instantáneas captadas al natural o creadas artificialmente que por una u otra razón han arañado nuestras pupilas. El eco en las paredes: voces que han elegido las grietas de las paredes como marca páginas. Las líneas de la mano: ¿un verso que no encuentra papel, una chuleta para declaraciones de amor, la quiromancia de un tatuaje? Para cualquier colaboración podéis enviar vuestras imágenes a elpixelenelojo@gmail.com
3 comentarios:
Jeje, la cenicienta pero al revés, vete tú a saber si melenuda o desmelenada. Cómo era, José?
Muax;-)
Alada. Literalmente se fabricó unas alas (y me enseñó como hacerlas)
Besos.
Bueno. Si era alada, entonces los zapatos sobran, efectivamente. Y también al revés que a la Cenicienta. Disfruta del vuelo.
Muax
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